domingo, 30 de julio de 2017

Lecciones de Jack Roach, el hombre en la sombra de los éxitos americanos

La preparación del deportista debería dividirse en tres fases. La primera, entrenarlo para entrenar; la segunda, entrenarlo para competir; y la tercera, entrenarlo para ganar”. Jack Roach, 68 años, será el ponente estrella del congreso anual de entrenadores españoles que se celebrará en Sant Cugat del Vallès (Barcelona) los días 29 y 30 de septiembre. Roach pasa por ser uno de los artífices de los éxitos olímpicos americanos en los Juegos de 2012 y 2016 tras asumir en 2008 el cargo dehead coach (entrenador principal) del equipo nacional júnior. Roach sustituirá a Mike Bottom, responsable del programa de la Universidad de Michigan durante los últimos años y quien por circunstancias personales no podrá viajar a España en esas fechas.
A la sombra de las grandes estrellas, el papel de Roach ha sido fundamental en la natación americana durante la última década. Su posición le permitió viajar por todo EEUU observando la manera de trabajar de un buen número de entrenadores. Roach fue el guía y mentor de decenas de nadadores, una figura muy respetada. La complicidad que alcanzó con Michael Phelps resume la enorme influencia de este hombre en la natación estadounidense.
Roach es uno de sus tipos cuyas historias deben ser escuchadas de vez en cuando”, escribió el periodista Jim McNally en un artículo publicado en febrero de 2015. Entusiasta de los deportes de resistencia, lleva 35 años entrenando, principalmente en EEUU pero también en México. El pasado mes de diciembre expuso en una conferencia: “Incorporar deportes complementarios es importante. Lanzamos nuestros chicos al agua y sólo queremos que naden. Como entrenador de chicos jóvenes cometí ese error. Sólo quería que nadaran. Correr, ir en bicicleta, remo, escalada, levantamiento de pesas… Todo contribuye a formar mejores atletas”. En otro momento de la charla, Roach habló del trabajo en seco, qué porcentaje del entrenamiento debe ocupar y a qué edades comenzar: “Ian Thorpe no hizo dobles sesiones hasta los 14 años, haciendo de 20 a 30,000 metros semanales. Hasta los 14 años siguió jugando al cricket y al fútbol. Subió a nueve sesiones de entrenamiento a los 14 años y a 10 a los 16”. Para el veterano preparador americano, compartir información sobre los entrenamientos es fundamental en el crecimiento de una nación.  “Cuando comencé a entrenar contactaba con los entrenadores que tenían éxito. Trataba de conocer lo que estaban haciendo. Uno de los mayores activos de la natación americana es que los entrenadores compartan información. Muy rara vez no he conseguido ayuda cuando la solicité”.
Para Roach, de los cuatro pilares del entrenamiento (frecuencia, intensidad, duración y técnica), éste último es el más importante. En cuanto a la competitividad de los nadadores, el americano ofrece una visión curiosa tomando como modelo los deportes de mayor contacto, entre ellos las aguas abiertas: “Hace años, durante una prueba del Mundial, observé que nuestros nadadores eran excesivamente respetuosos con respecto a los europeos. Parecía que querían disculparse cuando había algún choque mientras los europeos tiraban de los trajes, agarraban los pies en los avituallamientos… A veces pienso que deberíamos empezar con las aguas abiertas para que los nadadores entiendan lo que es un deporte de contacto, para que sean conscientes de que el que está en la calle de al lado está tratando de arrebatarte algo”.